Ernesto Sabato


Se licenció y doctoró en Ciencias Físicas en la Universidad Nacional de La Plata, fue a París, al Instituto Curie mediante una besa, y allí compartió sus inquietudes literarias con miembros del movimiento surrealista, después marcho a Estados Unidos, permaneciendo un año en el Instituto Tecnológico de Massachussets, regresando a Argentina en 1940 ejerciendo como profesor de física en la Universidad Nacional de La Plata, hasta el años 1943 en el que abandonó la ciencia para dedicarse exclusivamente a la literatura.

Continuó años con su carrera literaria hasta que la ceguera le impidió la lectura y la escritura, ha sido acreedor de numerosos premios y honores y en el año 1984, recibió el Premio Miguel de Cervantes.







El abismo de la condición humana