La vida de Jack McEvoy, un periodista especializadoen crímenes atroces, sufre un vuelco cuando muere su hermano, un policía del Departamento de Homicidios. McEvoy decide seguir el rastro de diferentes policías que, como su hermano, presuntamente se suicidaron y dejaron una nota de despedida con una cita de Edgar Allan Poe. En realidad todo apunta a que murieron a manos de un asesino en serie capaz de burlar a los mejores investigadores. Su descubrimiento hace que intervenga el FBI.
Una de las agentes, Rachel Walling, personaje habitual en las Novelas de Michael Connelly, desempeña un papel fundamental en la investigación. Tiene una secuela en En Cauces de maldad.