Intentando dejar atrás su triste pasado, Mandy empezó a trabajar como secretaria para una fundación benéfica. Allí conoció a Sutter, por el que se sintió muy atraída, y el destino hizo que tuvieran que viajar juntos a la Gran Barrera de Coral.
En aquel paradisíaco lugar, Mandy tendría que luchar contra sus demonios con la ayuda de Sutter que, poco a poco, le brindó la oportunidad de volver a la vida...